En una zona perdida entre los bosques espesos del Sur del Reino de Gröholm ... donde el trino de las alondras había cesado y el murmullo del viento seseando las copas de los árboles era el único sonido que se percibía ...
Existía un pequeño castillo abandonado ... bastión de una vieja gloria que antaño quedose acallada por el deshonor ...
Un fornido hombre entraba en la estancia más recóndita, un lugar que bien pudiera haber sido descrito como la cámara de un alquimista ...
... la debilidad de su brazo deforme derecho, acusado por una enfermedad de la niñez y que impidió su crecimiento era sobradamente compensada por su musculosa extremidad izquierda ... el saco que portaba se agitaba violentamente ...
Del interior del saco un niño asustado salió reptando ... desconcertado divisó lo que al fondo de la habitación parecía ...
... ¡Una enorme y jugosa tarta de chocolate! ...
... Manfred, aquel que en un futuro las leyendas y los cuentos de viejas alrededor del fuego llamarían "El hombre del saco" observaba aquella escena que tantas veces había presenciado en los últimos diez años
... Jezzabel: ¡Come pequeño querubín! ... ¡Come hasta hartarte ... la he hecho para tí!
... Sin embargo ... para Jezzabel esa era la forma de obtener el brebaje vital que representaría arrancar unos meses más de vida al tiempo que, inexorable, esperaba arrebatarle su lonjeva y antinatural existencia
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