El Conde Boris Zaroff reside en
un Regio castillo al Suroeste del Reyno de Gröholm, … una fortificación
sencilla y austera …
A la par que inexpugnable por la altura de sus muros … el refuerzo de sus torres...y el intrincado y sinuoso acceso de los tupidos bosques de coníferas que lo circundan.
Regenta uno de los dos poderosos Clanes Lobo, bajo la Corona de Gröholm ... conocido como la Casa Huargo Gris
el Conde Zaroff goza del favor del Rey, convirtiéndose en un poderoso hombre de Gröholm del que además se le ha liberado del pago de impuestos a la corona
... pues su Condado no produce nada, no cultiva, no dispone de cabaña porcina ni ganadera… trashumante o de corral … ni tan solo se talan los árboles para aprovechar la madera …
La verdadera contribución del Conde Boris Zaroff a la corona es de otra naturaleza bien distinta …
Su Señor, el Conde Boris Zaroff consiguió reunir a un buen número de mercenarios y salvajes bajo una misma bandera ... asesorado por sus dos hombres de confianza ... Rudolff su consejero y Bolfhür el capitán de sus Tropas.
Los hermanos Boärd ... conocidos como los osos rojos fueron los primeros en unirse al clan ...
Brutales y despiadados ... conocidos por la enorme fuerza de Ursus, el Gigante
Sus soldados … temibles mercenarios entrenados en las más duras condiciones
Hombres nacidos de la guerra
Diestros en el arte del acero
Deseosos de las más arriesgadas misiones
Jactándose de los enemigos caídos en el campo de batalla
Del oro arrebatado a sus víctimas
Del temor infundido al oir su nombre
Del deseo insaciable de luchar
Y atrae el oro de ricos nobles y prohombres
Que no disponiendo de ejército propio
Entregan su oro a cambio de la protección o … pactando que sean liberados de otros señores considerados incómodos
Pues el Barón Boris Zaroff lidera un pequeño ejército …
… de MERCENARIOS.
El Conde Boris Zaroff gobierna el suroeste del Reino desde su sobrio salón.... rodeado de sus trofeos de caza ...
Como el gran oso pardo que cazó en su ceremonia de hombre... en la que perdió su inocencia de niño y casi un la vida ...
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